martes, septiembre 23, 2008

Un instrumento de distinción y seducción




El perfume


Desde que los egipcios comenzaron a usar el incienso, la mirra y los pétalos de rosas como esencias para sus rituales románticos, pasando por la revolución industrial hasta nuestros días, el perfume ha ido cobrando una importancia dentro de nuestra sociedad que se extiende en la actualidad a hombres y mujeres por igual.


El perfume revela numerosas facetas del carácter. Cambiamos de aroma según el estado de ánimo y del momento del día: por la mañana más suave, por la noche más intenso, más fresco si vamos a la playa o el campo, en fin. Llevar una u otra fragancia puede ayudar incluso a sentirnos mejor.

Algunos consejos para optimizar su rendimiento son:

1. Se debe aplicar el perfume en las zonas donde se sientan las palpitaciones del corazón, ya que éstas mantienen una temperatura mayor que el resto del cuerpo y el movimiento rítmico de la zona ayuda a expulsar la fragancia cuidadosamente.


2. Las mejores zonas para aplicarlo son: detrás de las orejas, en la nuca, en el centro de la clavícula, en medio de los senos, ambas muñecas, en la parte superior de los codos y en la parte posterior de las rodillas.


3. Para que se fije mejor se debe aplicar en toques breves con las yemas de los dedos.


4. Nunca frote una muñeca contra la otra, destruye la estructura de la fragancia y se evapora antes.


5. El clima influye en la evaporación del perfume. Si está en clima caliente aplique menos cantidad de perfume ya que el calor facilita su evaporación y se siente más.


6. Si está en clima frío, el efecto vasoconstrictor provoca que las notas olfativas se expandan más lentamente y el aroma es más suave, por lo que se puede aplicar mayor cantidad de la fragancia.


7. El perfume se fija en mayor o menor cantidad dependiendo del tipo de piel de cada persona, y allí juegan un papel fundamental la cantidad la alimentación, el tipo de piel y estilo de vida.


8. Más cantidad no significa mayor duración. No hay que abusar de los perfumes en ninguna de sus presentaciones: aunque quien lo lleva no detecta la fragancia, ésta sigue ahí y los demás si la perciben


9. El aroma de jabones, geles, cremas o lociones perfumadas puede modificar la fragancia del perfume y contribuir a que este se pierda más rápidamente. Lo recomendable es aplicar el perfume luego del baño y usar cremas hidratantes con miel y vitamina E del mismo perfume.


10. Las pieles secas necesitan mayor cantidad de fragancia. Si la dieta es baja en grasas, el perfume dura menos tiempo. En las personas que fuman la duración de un perfume es inferior y, además, su aroma puede cambiar.

1 comentario:

Guille dijo...

Leo!

Muy buen artículo, es realmente notable como en los últimos años el perfume ganó popularidad y presencia, muchas veces de la mano de un márketing que solo pretende llevarse ganancias aprovechando el negocio, pero muchas otras de entusiastas que comenzan a interesarse por el mundo de las fragancias y se dejan llevar por ellas.
Saludos,
Vivi
Perfumes Hombre